A la hora de elegir un buen zapato, es necesario tener en cuenta la salud de nuestros pies. En este artículo te vamos a hablar sobre las afecciones más comunes de los pies:

Juanetes

Los juanetes son una afección dolorosa y poco estética del pie. Se trata de una protuberancia ósea del dedo gordo o primer dedo que puede llegar a ser bastante molesta.

Causas:

 Quien padece este tipo de deformación es porque ha abusado durante mucho tiempo de zapatos de tacón y de punta fina o estrecha. También influye el factor genético o personas que padecen previamente algún otro tipo de malformación ósea. 

Tratamiento:

Los Juanetes tienen tratamiento, aunque es un poco invasivo, ya que depende de cirugía. Otra opción si no te importa demasiado la estética del pie, es el uso de plantillas o calzado que se adapten más a éste y que no sea tan estrecho. 

Recomendación:

Un calzado amplio y cómodo, evitar tacones y zapatos de puntera estrecha harán que sea más confortable y llevadero tu día a día. Y si el dolor ya resulta demasiado molesto, lo mejor es consultar a tu médico.

Metatarsalgia

La metatarsalgia afecta a la zona de los huesos del metatarso con una pérdida de volumen. El metatarso es el hueso que permite la articulación de los dedos de los pies. 

Causas:

Este tipo de afección la sufren más a menudo las personas que suelen correr o hacen actividades tales como saltar. Otros factores que pueden producir la metatarsalgia son, por ejemplo, alguna deformidad previa del pie, el uso de zapatos demasiado apretados o, por el contrario, demasiados anchos. Alguno de los síntomas pueden ser: hormigueo e inflamación a parte del dolor.

Tratamiento:

Hay remedios conservadores que pueden aliviar este problema como el hielo y el descanso. Si con este tipo de remedio casero no disminuye el dolor, lo más recomendable es consultar a tu médico y te mostrará otros tratamientos.

Recomendación:

Para evitar el mayor impacto que se produce por la pérdida de volumen del hueso y en consecuencia dolor, es recomendable el uso de un calzado adecuado con plantillas que amortiguan y alivian dicho impacto.

Fascitis plantar

La fascitis plantar se produce por la inflamación de la fascia plantar, que se encuentra en la parte inferior del pie y provoca un dolor intenso y continuo en el talón. 

Causas:

En la mayor parte de los casos este tipo de dolencia se debe a un mal apoyo del pie. En ocasiones, se forman espolones, aunque no tienen por qué tener relación con el dolor de talón ya que hay gente que tiene este problema de espolón, pero no sienten dolor en el talón.

Tratamiento: 

La Fascitis Plantar es un dolencia que suele durar meses. Cuando los remedios conservadores tales como hielo, reposo y estiramientos no funcionan, lo mejor es volver a tu médico y sea éste el que te diga que otros tratamientos y soluciones hay.

Recomendación:

Lo más aconsejable para este tipo de afección es llevar calzado de mucha sujeción para que la plantilla, en la zona del talón, no se mueva ya que sería contraproducente y causaría más problemas. Además, si el zapato tiene una suela gruesa que amortigüe al caminar será mucho mejor y aliviará bastante las molestias.

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