Todos sabemos que con la llegada del preciado verano dejamos más al descubierto nuestros pies. Lo que conlleva a que estén más expuestos al sol, al calor, y a la humedad por sudor y por el tiempo que pasamos tanto en la playa como en la piscina.

A todas nos gusta lucir unos pies cuidados con unas bonitas sandalias, para ello tendrás que seguir estas recomendaciones y consejos para tener los pies perfectos en verano.

#1. Higiene y pedicura frecuente:

Mantener los pies limpios y secos es una de las cosas más importantes a la hora de su cuidado, ya que, en verano, el calor hace que nuestros pies se calienten y suden más con lo que son más propensos a las bacterias y hongos.

Procura lavar los pies tanto de día como por la noche y secarlos bien, hay que evitar al máximo la humedad.

En cuanto a la pedicura lo recomendable es realizarla como mínimo dos veces al mes. Cortar la uñas con un cortaúñas con un corte recto, olvídate de darles una forma redondeada cuando las cortas ya que puede dar paso a tener uñas enterradas que duele bastante. Limar después manteniendo su forma cuadrada y redondear los picos es lo más aconsejable. Quitar las cutículas, limar las durezas con una piedra pómez 2 o 3 veces por semana sin olvidarte de los talones e hidratar.

#2. Hidratación y exfoliación:

Lo ideal es hidratar los pies dos veces al día, pero a veces con las prisas de la mañana no tenemos tiempo, así que si lo dejas para noche puedes aprovechar para masajear tus pies cansados después de un largo día de trabajo. Recuerda que antes de hidratarlos debes limpiarlos y secarlos muy bien. Al igual que la hidratación también es importante la exfoliación, una forma no agresiva de retirar las células muertas de nuestros pies, si puedes hacerlo de 2 a 3 veces por semana ¡será fantástico! Y por supuesto no te olvides de la protección solar, ya que los pies tienen la piel muy delicada y se queman del sol con facilidad.

#3. Mantener secos los pies:

Igual de importante es mantener los pies limpios como secos, aunque parezca tarea imposible en verano, hay productos que te pueden ayudar a conseguirlo. Los desodorantes no quitan la humedad, pero desodorizan, luego hay otros productos antitranspirantes que taponan los poros e impiden que el pie sude tanto. También puedes aplicarte unos polvos de talco después de la ducha y antes de calzarte, esto hará que el sudor se absorba.

#4. Elegir un calzado adecuado:

El uso de chanclas queda única y exclusivamente para para la playa y para la piscina. Si abusas de ellas puede acarrear problemas de sobrecarga en gemelos, glúteos y caderas porque impiden que caminemos de una forma adecuada.

Lo ideal es llevar un calzado cómodo y que transpire, sobre todo si es un calzado cerrado. Hay zapatillas con tejidos o materiales perforados que ayudan a que el pie respire.

Las sandalias por ejemplo es uno de los zapatos más demandados en verano ya que permiten tener mantener el pie fresco y cómodo. La mejor elección son las sandalias que se ajusten bien a tu pie y con sujeción al tobillo, y si llevan una buena plantilla mejor.

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